La semana pasada se celebró en Mauricio la 36ª Conferencia Internacional de Autoridades de Protección de Datos y Privacidad. Esta conferencia anual reúne a autoridades de protección de datos de todo el mundo, así como destacados profesionales del sector privado. En ellas se abordan una serie de cuestiones que son las que en los siguientes años son discutidas en los foros de esta materia y se aprueban resoluciones que han de ser implementadas por las autoridades.
De las reuniones mantenidas se han aprobado las siguientes resoluciones:
La unión de la Internet de las cosas y el Big Data hace de los problemas derivados de aquella más importantes. Es fundamental que los que comercializan dispositivos sean claros sobre qué datos recogen, con qué finalidades y durante cuánto tiempo los retendrán; sin embargo, a día de hoy no siempre se ofrece información adecuada, suficiente y comprensible. Por tanto, el consentimiento basado en esa información deficiente no puede considerarse un consentimiento informado.
La privacidad desde el diseño y por defecto (privacy by design y privacy by default) tiene que convertirse en un argumentos claves de venta de los dispositivos, lo que tiene consecuencias por ejemplo en las medidas de seguridad que deben aplicarse. En la medida de lo posible, es importante que los datos se traten en local y si no que se garantice el cifrado de los datos de punto a punto.
Las autoridades de protección de datos se comprometen a vigilar los desarrollos en este campo y llevar a cabo las medidas necesarias en caso de que incumplimientos legales. Hay que recordar que este asunto tiene especial relevancia, toda vez que el Grupo de Trabajo del Artículo 29 aprobó el pasado mes un Opinión sobre los recientes desarrollos de la Internet de las cosas.
Por último se ha adoptado una resolución en la que se insta a las autoridades de protección de datos a aceptar el Acuerdo Internacional de Cooperación Transfronteriza liderado por la autoridad canadiense, como base para facilitar la cooperación internacional.
Lo más significativo de esta resolución, sin embargo, es el compromiso de apoyar el desarrollo de una plataforma de información internacional que ofrezca un espacio seguro para que los miembros de la conferencia internacional puedan compartir información confidencial y que facilite la puesta en marcha de acciones coordinada y complemente otros mecanismos de coordinación.